El presidente Borís Yeltsin continuó ayer la formación del Gobierno con las personas recomendadas por el primer ministro, Serguéi Kiriyenko, pero los nombramientos más importantes de los últimos días se produjeron fuera del Gabinete ministerial, y ayer resurgió el ultraliberal Anatoli Chubáis, nombrado presidente de la empresa Sistema Energético Unido (SEU), que controla el monopolio de la electricidad rusa.Los indicios de que Chubáis volvería a ser uno de los hombres más influyentes del país al frente del SUE empezaron incluso antes de que fuera destituido como primer vicejefe de Gobierno el 23 de marzo pasado. Pero Kiriyenko se apresuró a declarar que eso no sucedería por ningún motivo. Kiriyenko trató ayer de dar la impresión de que es él quien domina la situación al asegurar que Chubáis será destituido en otoño si no cumple con éxito la tarea de preparar al país para la dura temporada invernal. Chubáis, uno de los políticos más odiados por la oposición, ha recuperado su influencia y, según algunos obervadores, ahora tendrá incluso más poder que antes, especialmente sobre los líderes regionales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 1 de mayo de 1998