Casi trece millones de espectadores siguieron por TVE-1 (en toda España) y TV-3 (en Cataluña) la victoria del Barcelona frente al Mallorca en el partido de la final de la Copa del Rey, jugado el miércoles por la noche. La tanda de penaltis atrajo a 12.931.000 seguidores y la prórroga del encuentro concentró a 11.323.000 aficionados, según datos de Sofres. Los 90 minutos reglamentarios del partido concentraron a 9.712.000 espectadores de media.En Cataluña, el partido, a través de TV-3, obtuvo una cuota de pantalla media del 51,6% (1.514.000 telespectadores), mientras que para TVE -con locución en castellano- el índice bajó al 17% (496.000 personas).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 1 de mayo de 1998