Adiós, Doñana. Y adiós, Madrid, con este alcalde que todos padecemos.El nombre de Madrid significa madre de los arroyos. Don Topo está empecinado en hacer viviendas para coches. Horadando y desplazando las aguas con el cemento. Si es cierto que las aguas siempre vuelven a su cauce... adiós, Madrid. Don Topo está construyendo una ciudad antipersonas.
Urge otro Dos de Mayo. Soy una madrileña afectada y preocupada.- .
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 19 de mayo de 1998