El único concejal de Nova Esquerra (NE) en el Ayuntamiento de Benidorm, Jacinto Gallego, denunció la semana pasada ante el alcalde, el popular Vicente Pérez Devesa, supuestas irregularidades en el pago de comisiones a políticos por asistencia a reuniones municipales. El caso podría desembocar en una acusación de prevaricación que implicaría a ediles del PP y al portavoz de EU. El escrito que Gallego remitió a Pérez Devesa, cuyo contenido se conoció ayer, asegura que el concejal de EU Francisco Barco (al que no se cita en el texto), no acudió a cuatro comisiones informativas celebradas el 22 de junio, aunque su firma aparece en los partes de asistencia y los correspondientes dictámenes. Según confirmó ayer un portavoz del equipo de gobierno, del PP, las firmas motivaron que el Ayuntamiento sumara a los ingresos de ese mes de Francisco Barco 60.000 pesetas más, a razón de 15.000 pesetas por cada una de las reuniones, a las que no asistió por motivos de salud. Al día siguiente de su denuncia, de índole interno, el propio portavoz municipal de EU comunicó al departamento de Personal que había descubierto un error en sus ingresos, ya que se le había abonado un dinero por un trabajo que no realizó. La anomalía ha desatado cierta polémica en el Ayuntamiento de Benidorm, donde nadie se explica cómo es posible que un concejal estampe su firma en actas de reuniones a las que no asistió. El equipo de gobierno calificó ayer de "muy extraño" el caso. Varios concejales del PP optaron por pedir explicaciones al portavoz de EU, interesándose por cuándo y en qué lugar firmó las actas. Fuentes de la oposición indicaron que el asunto podría entenderse como un caso de prevaricación, en el que implicaron a los concejales del gobierno por trasladar al departamento de Personal unas planillas de asistencia que no responden a la realidad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 15 de julio de 1998