El hundimiento del suelo de una vivienda y grietas atribuidas a defectos en la cimentación provocaron que el domingo fuera desalojada por los bomberos el ala derecha del edificio de la calle de Pelayo, 32, en el distrito de Centro. Doce personas pasaron la noche fuera de sus casas, en albergues municipales o en casas de familiares, según la Policía Municipal.El desalojo fue a las 17.30 horas. Los bomberos recibieron una llamada que avisaba de la caída de parte de la fachada.
Al llegar al lugar comprobaron que el suelo de una vivienda de la tercera planta se había hundido.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 1 de septiembre de 1998