La policía de barrio (parejas de agentes en moto y a pie que patrullan siempre en la misma zona) está dando buenos resultados. En los distritos de Villaverde y Usera se ha conseguido reducir los delitos en un 15% en lo que va de año, según las estadísticas ofrecidas ayer por la Jefatura Superior de Policía.Junto al contacto ciudadano, los agentes de barrio han conseguido que disminuyan en un 25% delitos violentos como robos con fuerza, robos a establecimientos y hurtos en el interior de vehículos, según José Ignacio Araújo, comisario del distrito de Usera. Durante sus patrullas, los policías tienen como funciones, aparte de sus cometidos habituales, recoger información para facilitarla a grupos especializados y visitar regularmente los colectivos e instituciones de la zona. El objetivo de estas rondas, según la Delegación del Gobierno, es conocer de primera mano los problemas del barrio.
El secretario de Estado de Seguridad, Ricardo Martí Fluxà, y el delegado del Gobierno en Madrid, Pedro Núñez Morgades, aseguraron ayer que la policía de barrio se extenderá el año que viene a todos los distritos de Madrid durante una visita que efectuaron a las dependencias policiales de Usera. En la actualidad, la policía de barrio tan sólo funciona en Chamberí, Vallecas, Arganzuela, Carabanchel, Villaverde y Usera.
Núñez Morgades señaló que se trata de un paso más para acercar la policía al ciudadano para que el servicio sea cada día más eficaz. La Jefatura Superior de Policía también ofreció datos del nuevo sistema de presentación de denuncias por teléfono implantado desde mayo en ocho comisarías de Madrid. Se han atendido 3.500 denuncias y ha permitido a la policía conocer la comisión de muchos delitos que antes no se llegaban a delatar. El director general de la Policía, Juan Cotino, señaló que el nuevo sistema funciona bien, ya que las víctimas de delitos menores sólo pierden tres o cuatro minutos en realizar la denuncia por teléfono.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 3 de septiembre de 1998