Un total de 28 obras de la última etapa del pintor irlandés Francis Bacon (1909-1992), en las que empleó las principales técnicas del grabado contemporáneo, se exponen desde ayer y hasta el próximo 12 de octubre en la sala Zapatería de Pamplona. La muestra recoge las obras gráficas que realizó Bacon desde 1988 hasta el año de su muerte en Madrid, salvo una datada en 1975, en muy distintas técnicas: serigrafía, aguatinta o litografía, entre otras. Javier Manzanos, técnico de Artes Plásticas de la corporación, destacó al presentar la muestra que "Bacon es imposible de etiquetar". "Se dice", añadió, "que es expresionista, pero él huía de este calificativo y prefería denominar a su pintura realista, como búsqueda del interior del hombre actual". La exposición ha sido organizada con la colaboración del Ayuntamiento de Palma de Mallorca.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 3 de septiembre de 1998