Abraham Olano cumplió el doble pronóstico, ganó la contrarreloj y tomó el mando de la general. Volvió así al vestir de amarillo en la Vuelta a España, suceso que no vivía desde 1995. Las diferencias respecto a sus rivales son, sin embargo, escasas. La Vuelta promete emoción cuando llegue la montaña.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 14 de septiembre de 1998