El rector de la Universidad Pública de Navarra (UPNA), Antonio Pérez Prados, aprovechó ayer su discurso de apertura del curso 98-99 para lanzar dardos al Ministerio de Educación. No es que lo haga mal respecto a las universidades, sino que no hace nada, vino a decir. Pérez Prados destacó entre sus preocupaciones "la ausencia de una política universitaria nacional clara y la falta de definición ministerial tras casi dos años de legislatura". La inauguración del curso pasado estuvo marcada también por las críticas generalizadas de los rectores a la desacertada labor de Esperanza Aguirre y su equipo ministerial. El rector de la UPNA recalcó la necesidad, apremiante, de buscar "fórmulas que permitan conseguir una satisfactoria coordinación del sistema universitario, a fin de garantizar la calidad del servicio público de la enseñanza superior". "Vanguardia de la sociedad" El presidente navarro, Miguel Sanz, presidió el acto académico. Recordó que la Universidad "debe ser siempre la vanguardia de la sociedad e instrumento de progreso", para lo que garantizó su apoyo y el de las instituciones forales. Sanz no escatimó halagos para la Universidad pública: "Es una entidad reconocida como una institución joven, pero consolidada; jovial, pero seria; inquieta, pero recta, y creo que hay en su actividad varios signos que nos indican que su desarrollo es el correcto y que está respondiendo satisfactoriamente a la confianza que en ella depositamos el conjunto de los navarros". Más de 11.000 alumnos cursarán este curso en la UPNA. Casi 700 profesores se encargarán de la docencia. El curso pasado, la universidad pública navarra tuvo un presupuesto de 6.762 millones de pesetas, cantidad superior en un 7,6% a los fondos manejados en el curso anterior. Asistieron la presidenta del Parlamento navarro, Lola Eguren; los líderes del PSN, Juan José Lizarbe, y CDN, Juan Cruz Alli. Y los rectores de las universidades de Navarra (privada), Zaragoza, País Vasco, Cantabria y el vicerrector de la de La Rioja.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 22 de septiembre de 1998