El alcalde de Jerez, Pedro Pacheco, y la Confederación General del Trabajo (CGT) se han lanzado por una pendiente de acusaciones recíprocas a raíz de las imprecaciones sobre enchufismo contra el gobierno municipal de algunos sindicatos y partidos de la oposición. El primer edil jerezano, que ha desmentido reiteradamente tales imputaciones, pasó ayer al ataque. Por eso señaló a los sindicalistas de la CGT como "los únicos que han intentado enchufar a gente en el Ayuntamiento". Pacheco explicó: "Los de la CGT metieron a sus hijos a dedo aquí, pero cuando nos dimos cuenta, fueron a la calle". El alcalde retó a sus rivales a decir los nombres y apellidos de los contratados de forma irregular por el consistorio: "Que digan quién y dónde está trabajando". Las declaraciones del alcalde de Jerez tuvieron una rápida contestación por parte de José García, presidente del comité de empresa del Ayuntamiento. García, destacado miembro de CGT, dijo sentirse aludido por las afirmaciones del líder del PA, y atribuyó la salida de uno de sus hijos de una empresa municipal a su actitud en el conflicto de la policía. El sindicalista anunció que en breve dará a conocer las identidades de los enchufados de Pacheco. "Van a salir nombres, y nombres de su partido, y personas que le han hecho favores".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 23 de octubre de 1998