El África subsahariana ha sido en lo que va de año escenario de una oleada de nuevos conflictos de envergadura, según reseña el informe anual del Instituto de Estudios Estratégicos. Más de una cuarta parte de los 44 Estados de la región están envueltos en conflictos, y "para muchos de ellos no hay ninguna salida a la vista".
El IISS inicia su relación de conflagraciones con el conflicto fronterizo que estalló en mayo entre Eritrea y Etiopía y sigue vivo. Se refiere también a la reactivación del conflicto de Casamance (al sur de Senegal) y a la rebelión de una parte del Ejército en Guinea Bissau. "Pese a los acuerdos de alto el fuego", siguen las hostilidades en Angola, Liberia, República Centroafricana, Chad, Congo-Brazzaville y República Democrática de Congo. Las dos mayores potencias regionales, Nigeria y Suráfrica, siguen sin ser capaces de lograr una influencia acorde con su potencial.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 23 de octubre de 1998