Carlos Cabal Peniche, de 42 años, acusado por la oposición de ser uno de los banqueros del Partido Revolucionario Institucional, fue detenido el miércoles en Australia. "Sabía que usted andaba cerca", dijo calmo al policía que le capturó. En México se le acusa de fraude y préstamos tramposos por un valor superior a los 700 millones de dólares. Es el último de los grandes banqueros que se lucraron durante la presidencia de Carlos Salinas de Gortari y que posteriormente huyeron del país.
La localización de Peniche, tras cuatro años de búsqueda, pone fin a una carrera de estafas que le convirtió en el delincuente de cuello blanco más buscado de México. El ex presidente de la Banca Cremi y Banca Unión, los que adquirió en una sorprendente carrera que en seis años le transformó en un multimillonario, tenía pendientes una docena de órdenes de búsqueda.
El banquero llegó a Australia acompañado de su esposa e hijos con identidades y pasaportes falsos, procedente de la República Dominicana. Una vez en Australia adoptó la identidad de Rafael Cerit Meritt, comerciante de vinos, y se instaló en una lujosa mansión a las afueras de Melbourne.
Su detención amenaza ahora con destapar en México la red de complicidades políticas. La fiscalía ya ha anunciado su intención de poner en marcha los mecanismos legales para solicitar su extradición inmediata.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 13 de noviembre de 1998
