El pescado, y sobre todo el azul, es la principal fuente de ácidos grasos esenciales, en especial los de la serie omega 3 y omega 6. La demanda de estos micronutrientes se incrementa en el embarazo, pero el aporte que ofrece la dieta actual es generalmente insuficiente, por lo que los expertos recomiendan subsanar ese déficit. Según Luis Cabero, presidente de la Sociedad Española de Obstetricia y Ginecología, asegurar un aporte adecuado de estos ácidos grasos durante la gestación y la lactancia se ha asociado en diferentes estudios con una mayor agudeza visual y desarrollo cognitivo del recién nacido. "Otros datos sugieren que los déficit nutricionales en este periodo favorecen la aparición en la edad adulta de procesos como hipertensión y diabetes", indica.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 16 de noviembre de 1998