Una vez cumplido el plazo de seis meses que se dio a las gasolineras para que regularan el control de sus sistemas de medida de carburantes, el 90% de los surtidores continúa en situación ilegal. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha realizado un estudio entre 1.163 surtidores de 199 gasolineras distribuidas por 20 provincias, en el que señala que sólo el 14% (172) de los aparatos de medida ha pasado el control: es decir, dispone de la etiqueta de verificación oficial situada en un sitio visible.El Ministerio de Fomento dictó una orden en mayo que señalaba que los propietarios de las gasolineras tenían que hacer revisar cada año los surtidores por un reparador debidamente registrado, y que la primera revisión debían efectuarla antes de seis meses.
Según el estudio de la OCU, se han encontrado surtidores con la etiqueta sólo en cinco provincias: Badajoz, Madrid, Málaga, Valencia y Vizcaya. "El resto deberían tener prohibido su uso por no cumplir los requisitos que garantizan que no hay fraude para el consumidor", señala la asociación. En algunas comunidades, como Cantabria, la responsabilidad no se puede achacar sólo a los dueños de las gasolineras, matiza la OCU, ya que en ellas no hay ningún reparador autorizado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 19 de diciembre de 1998