El novelista vallisoletano Miguel Delibes ha mejorado en los últimos días de las secuelas derivadas de la intervención quirúrgica a la que fue sometido en una clínica de Madrid. El escritor, según fuentes familiares, "puede ser dado de alta en los próximos días, ya que en los tres últimos días le ha remitido la fiebre y los facultativos le han retirado los antibióticos después de habérsele realizado muchas pruebas". Las mismas fuentes confirmaron ayer tarde que el autor de El hereje sufrió el pasado mes de diciembre una infección derivada de la operación a la que fue sometido, lo que le ocasionó una recaída de su enfermedad "que no revistió mayores complicaciones", pero que obligó al novelista, de 79 años de edad, a continuar en cama y en observación facultativa.A pesar de permanecer en el hospital, Miguel Delibes no ha parado en su producción literaria. Además de sus habituales trabajos, la pasada semana aprovechó para felicitar al último ganador del Premio Nadal de literatura, el vallisoletano Gustavo Martín Garzo. Este premio fue precisamente, con La sombra del ciprés es alargada, el que sacó del anonimato a Delibes en 1948 al ganar su cuarta edición.
Antes de dedicarse por entero a la literatura, Miguel Delibes alternaba el trabajo de caricaturista en el periódico El Norte de Castilla, que después dirigió, y las clases de Derecho Mercantil en la Escuela de Empresariales. Su amplia producción -"el escribir es un oficio", ha afirmado Delibes en reiteradas ocasiones- y su pertenencia a la Real Academia Española completan la vida de este novelista, que ha vendido a los pocos meses de su salida al mercado más de 200.000 ejemplares de El hereje, una novela ambientada en la Castilla de mediados del siglo XVI y que representa, según el autor, un alegato a la libertad frente a la intolerancia entre hermanos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 12 de enero de 1999