El subsuelo de Móstoles (196.500 habitantes) no sólo alberga tuberías, ratas y vehículos. También esconde restos paleontológicos. Un mostoleño estudioso de la materia, José Martín, acaba de demostrarlo aireando un cuerno y parte de un costillar de mastodonte "de entre 10 y 15 millones de años de antigüedad". El hallazgo se ha producido en un paraje situado entre el arroyo de El Soto y el río Guadarrama. Este reclamo -que asoma medio metro a la superficie- ha dado resuello al concejal de Patrimonio de la localidad, Manuel Corpa, del grupo mixto, para pedir por escrito al nuevo director general de Patrimonio, Javier Aguilar, "protección para la zona y la carta arqueológica de Móstoles".Lo que tiene en mente el edil es "que la Comunidad de Madrid investigue la riqueza del paraje, lo proteja de expoliadores y lo ceda para el disfrute de los ciudadanos mediante la creación de aulas taller y un museo". Y le lanza la pelota a la Administración autónoma: "Es la única autoridad competente en la materia".
El cuerno y el fragmento del costillar "son vecinos" de otro yacimiento que el propio Martín descubrió en 1992 y cuyas piezas se trasladaron al Museo de Ciencias Naturales. Su director, Jorge Morales, recuerda que por aquel entonces técnicos de la Comunidad se ocuparon de excavar la parcela, elaborar informes e incluirlos en la carta paleontológica (un documento donde se recogen los principales yacimientos de toda la región). "La riqueza del enclave va mucho más allá de Móstoles y llega hasta la localidad de Moraleja de Enmedio, por lo que merecería la pena montar un parque paleontológico en la zona", comentó Morales. Pero, de momento, la Comunidad está a la expectativa, sin agobios. "La mejor manera de proteger unos restos valiosos es impedir que se construya en el terreno y guardar cierto secretismo sobre su ubicación para evitar el asalto de desaprensivos", señaló un dirigente de la Consejería de Educación y Cultura. "Esa zona", continuó, "no tiene ningún peligro porque no existe previsión municipal de edificación; eso lo estamos vigilando". Así y todo, desde la Comunidad se anima al Ayuntamiento de Móstoles a promover aulas taller o un museo, siempre previo aviso a la Dirección General de Patrimonio.
El concejal mostoleño Manuel Corpa, inquieto por las explicaciones del Gobierno regional, augura una hecatombe paleontológica: "Si la Comunidad no nos ayuda de forma más activa, la lluvia, los humanos y los vertidos químicos que se realizan cerca, y que ya hemos denunciado varias veces al Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil , borrarán el rastro de los orígenes de Móstoles".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 12 de enero de 1999