Los tribunales de justicia verán el caso del falso informe del Ministerio para las Administraciones Públicas que se supuestamente se utilizó para hacer creer que el alcalde de Sant Andreu de la Barca, el socialista Enric Llorca, incurría en incompatibilidad al simultanear este cargo con el de jefe local de sanidad. El PSC del Baix Llobregat anunció ayer que presentará una querella contra dos ediles de CiU por utilización fraudulenta de la identidad real de otras personas, por utilización de documentos falsos en perjuicio de terceros y por un delito contra el honor. La querella se dirige contra dos concejales de CiU en la localidad, Josep Camps y Jordi Rubio, a los que los socialistas acusan de haber participado en la falsificación del documento y su posterior difusión a través de la prensa, y contra Javier Alonso, ex concejal socialista que ahora milita en las filas de Unió Democràtica, partido coligado con Convergència, quien supuestamente fue el autor material de la manipulación del documento CiU niega Los concejales nacionalistas de Sant Andreu de la Barca niegan haber participado en la falsificación del documento, fabricado manipulando una carta de cortesía de La Moncloa, sede de la Presidencia del Gobierno del Estado, y aseguran que los socialistas están utilizando este caso como "una cortina de humo". El primer secretario del PSC del Baix Llobregat, José Zaragoza, acusó a los dos concejales de CiU de practicar "una política repugnante basada en la difamación del contrario". Zaragoza pidió además al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, que destituya a Josep Camps como asesor del Departamento de Presidencia de la Generalitat. Por otra parte, el pleno del Ayuntamiento de Sant Andreu de la Barca aprobó -con los votos del PSC, IC y el PP- una moción presentada por el alcalde en la que se pedía la dimisión de los dos ediles de Convergència i Unió.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 30 de enero de 1999