El presidente español, José María Aznar, invitó ayer a sus colegas europeos a "cambiar" porque "cambiar es crecer y sumar, unir y avanzar". Aznar hizo estas declaraciones en el marco del XIII congreso del Partido Popular Europeo (PPE). "El PPE tiene que ser el gran partido de centro, que apueste por la renovación, lejos de cualquier tentación nacionalista y de fórmulas proteccionistas. Un partido europeo capaz de atender las nuevas demandas de nuestros ciudadanos", dijo el jefe del Gobierno español ante los delegados. Antes, en declaraciones a la prensa, había reiterado su preocupación por el estancamiento de las negociaciones financieras en la Unión Europea, aunque negó que eso se deba a problemas entre España y Alemania.
La sensación de que los conservadores europeos viven una "etapa de transición", como la definía ayer un delegado, domina los debates del congreso del PPE. Desde ayer y hasta mañana, más de 500 delegados debaten en Bruselas el futuro de una formación política que ha vivido como una victoria de sus ideales la caída del muro de Berlín, pero que observa atónita la pérdida del poder en países clave de la UE, como Alemania, Francia y el Reino Unido.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 5 de febrero de 1999