EL PAÍS informa de que el Ministerio de Educación prepara un decreto según el cual la clase "alternativa" para los escolares que no quieren clase de religión católica sería no sólo obligatoria (lo que yo estimo anticonstitucional), sino, además, evaluable en notas académicas, lo que ya ha sido declarado inconstitucional por el Supremo. Plantearé mi idea estableciendo una comparación: ¿dispondremos alguna vez los padres no católicos de una "enseñanza de acuerdo con nuestras convicciones no católicas" para nuestros hijos no católicos sufragada por bolsillos católicos a través de los impuestos del Estado? ¿Es "libertad religiosa" que mis impuestos de no católico estén legalmente obligados a sufragar la enseñanza de la religión católica?-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de marzo de 1999