Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

La Universidad flexibiliza su oferta para potenciar las lenguas autonómicas

Las lenguas autonómicas y el castellano conviven sin ninguna crispación en la mayoría de las universidades de Cataluña, la Comunidad Valenciana, Galicia, Navarra, Baleares y el País Vasco. Los estudiantes eligen el idioma, siempre que exista la correspondiente disponibilidad de docentes, que también eligen lengua. La creciente generalización del bilingüismo en esas comunidades hace que los profesores den clase indistintamente, y muy a menudo sin previo aviso, en cualquiera de las dos lenguas. La excepción es el País Vasco, en donde una reforma aprobada recientemente permitirá a los alumnos de la universidad pública elegir idioma por asignatura, y no por curso como sucedía hasta ahora.

Una oferta flexible que permita potenciar las lenguas autonómicas y deje a los alumnos cada vez más posibilidades de elegir el idioma que mejor se adapte a su currículo o sus expectativas profesionales. En esta línea están avanzando las políticas lingüísticas de las universidades de las seis comunidades autónomas con lengua cooficial. El estudiante tiene la palabra y, de acuerdo con su demanda y el ritmo de reconversión y de contratación de los docentes, se aumenta progresivamente la oferta de materias impartidas en lenguas autóctonas.

Lejos de las tensiones políticas en defensa de los idiomas autonómicos, en la Universidad prima su convivencia tranquila con el castellano. Y se les empieza a unir gradualmente el inglés. Los profesores escogen la lengua en la que quieren impartir las clases, aunque la frecuencia en la elección del idioma autóctono es extremadamente dispar según la comunidad, la universidad, la facultad y la materia.

En el País Vasco y Navarra, la mayoría de los universitarios estudia en castellano, aunque el euskera ha ganado una considerable presencia en las aulas en los últimos años. Su avance es lento, fundamentalmente por la escasez de materiales didácticos y de profesorado preparado para impartir da se. Todas las universidades públicas y privadas de ambas comunidades han redoblado sus esfuerzos para aumentar la oferta en lengua vasca y satisfacer así la creciente demanda del alumnado. La universidad pública vasca, con más de 60.000 alumnos, quiere dejar atrás su actual modelo —estudiar en euskera o en castellano toda la carrera— y convertirse en una universidad bilingüe en donde se estudie en ambos idiomas.

Al contrario de lo que sucede en el caso del euskera, la proximidad entre el catalán y el castellano permite que ambas lenguas se mezclen sin problemas en las aulas. En Cataluña y. Baleares, las leyes ponen en pie de igualdad a los dos idiomas. Los estudios más recientes muestran que la proporción entre el uso del catalán y el castellano es de dos a uno en las universidades catalanas, mientras que en Baleares se imparten algo más de la mitad de las clases (54%) en catalán.

En Galicia está generalizado el uso del gallego en la administración universitaria, pero no entre los profesores (22% en Santiago y 17% en Vigo). En la Comunidad Valenciana, las dos universidades más comprometidas con el bilingüismo, la Jaume I y la Universidad de Valencia, han generalizado todas las titulaciones la oferta de materias impartidas en valenciano, pero se mantiene un fuerte desajuste entre la demanda de clases en valenciano por parte de los alumnos y las que realmente se llegan a impartir en esta lengua.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de marzo de 1999