Grupos de partidarios y detractores de la intervención de la Alianza Atlántica contra Yugoslavia en el conflicto serbio-kosovar se encontraron ayer por la mañana en la plaza de Sant Jaume, de Barcelona, y provocaron algunos momentos de tensión, aunque no se llegó a producir ningún incidente. Medio centenar de personas, que acudieron a la convocatoria del Círculo de Yugoslavos en España y sus Amigos, se manifestaron exigiendo el fin de los bombardeos aliados y la búsqueda de un acuerdo político que acabe con el conflicto. Por otra parte, algunos ciudadanos que apoyaban la actuación militar de la OTAN se enfrentaron verbalmente con los manifestantes recríminándoles su postura. El portavoz del Círculo de Yugoslavos, Ducan Stajic, expresó su rechazo a la intervención de la OTAN y de Estados Unidos, y criticó duramente "la imagen distorsionada" del conflicto que los medios de comunicación europeos y norteamericanos están ofreciendo. Stajic señaló que "Estados Unidos y la OTAN han apoyado a unos terroristas sin importarles las víctimas serbias y albanesas", y añadió que "mueren los civiles, mientras los políticos juegan a la guerra". Según Stajic, la polémica sobre la intervención de la OTAN puede acabar con la cohesión de la Unión Europea. Al frente de la concentración se encontraban los jugadores serbios de baloncesto del FC Barcelona Shasha Djordjevic y Milan Gurovic. El primero aseguró que se trata de "una catástrofe humanitaria en la que sufren todos: serbios, albaneses y rumanos". En opinión de Djordjevic, la crisis va más allá de lo que repreenta la figura del presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic. A juicio de Djordjevic, "Europa tiene que parar esta inútil guerra y solucionar el problema por la vía pacífica, políticamente", de manera que "las dos partes se den la mano y vuelvan a sus casas lo más pronto posible para vivir en paz". El jugador serbio añadió que el conflicto "es una vergüenza para todo el mundo, un fallo político enorme que Europa va a pagar muy caro". Su compañero de equipo Gurovic no hizo comentarios.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 5 de abril de 1999