El Gobierno colombiano y la guerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) reanudaron ayer las conversaciones de paz interrumpidas hace tres meses. El presidente, Andrés Pastrana, expresó su confianza en que se alcance un acuerdo antes del próximo 7 de mayo, fecha en la que finaliza el periodo acordado para el repliegue del ejército en una zona de 42.000 kilómetros cuadrados.
Sin embargo, Pastrana no quiso pecar de optimismo y reconoció que es fundamental acordar una agenda mínima para las conversaciones. "La paz no es fácil, la paz hay que construirla día a día y es un proceso que necesita mucho tiempo", dijo.
Entre los temas que ambas partes aún tiene que tratar destacan la lucha contra las unidades paramilitares y la erradicación de los cultivos de coca y su sustitución por otro tipo de plantaciones.
Pastrana advirtió de que si no se alcanza un acuerdo sobre los temas que hay que discutir, se demostrará que la guerrilla no tinene voluntad negociadora y que, además, el repliegue del ejército no tendrá sentido. "¿Para qué existe una zona de distensión si no hay interés en la paz?", se preguntó.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 21 de abril de 1999