UGT, con su secretario general a la cabeza, Cándido Méndez, se manifestó ayer por las calles de Bilbao y entregó a la patronal vasca, Confebask, un comunicado en el que se declaraba firme en su convocatoria de huelga para el próximo 21 de mayo en Euskadi, aunque dejaba una puerta abierta a la negociación. Méndez aseguró que Euskadi es una de las pocas comunidades en las que no se ha firmado un pacto para la reducción y reordenación de la jornada.
El líder de la UGT vasca, Carlos Trevilla, insistió en que su sindicato no quiere que las centrales firmantes del Pacto de Estella (ELA y LAB) se apropien de la gran reivindicación actual del movimiento obrero.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 24 de abril de 1999