Un hombre de 67 años, J.I.L., falleció ayer en Zestoa al incendiarse, mientras dormía, la chabola en la que vivía, según informaron fuentes del Departamento vasco de Interior y de los bomberos. El incendio se desató pasadas las once de la noche del viernes en el barrio Txoriboga de la localidad guipuzcoana. Los primeros indicios apuntan que la víctima se dejó encendido, mientras dormía, el fuego de una cocinilla. Todo parece indicar que ésta fue la causa del fuego. Sin embargo, el fallecimiento no fue provocado por el fuego, sino por intoxicación, debido a los gases producidos en el incendio, según fuentes de los bomberos. El cadáver fue trasladado al Instituto Anatómico Forense de Polloe, en San Sebastián.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 25 de abril de 1999