El presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, está tan concentrado en los problemas que se están estudiando en la cumbre de la OTAN que se olvidó en el edificio donde se celebran las reuniones nada menos que la maleta nuclear. Según informó ayer su portavoz, Joe Lockhart, Clinton acabó más pronto de lo previsto sus reuniones de trabajo del sábado y decidió volver a la Casa Blanca sin avisar al ayudante que le sigue a todas partes con el famoso maletín.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 26 de abril de 1999