Unió Democràtica (UDC), el socio democristiano de Convergència, se siente discriminada por el trato informativo que recibe en la televisión pública catalana. Pero sólo hasta cierto punto. Por este motivo, trasladará sus quejas al seno del Consejo de Administración de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV), pero en ningún caso piensa aliarse con la oposición parlamentaria y reprobar a la cúpula directiva de TV-3. Todo se quedará en una pataleta del socio minoritario de la coalición nacionalista. Los democristianos reclaman que los informativos de TV-3 se rijan por criterios de interés periodístico y no político, aseguran. "Lo único que pedimos", manifestó ayer Eugeni Pérez Moreno, portavoz de UDC, "es una aplicación de criterios homogéneos con independencia de quién es el protagonista de la noticia". Es decir, el trato discriminatorio de TV-3, al que Pérez se refirió como "nuestra televisión", no afecta tan sólo a los democristianos, sino que es extensivo a todos los partidos de la oposición. La reunión del Consejo de Administración de la CCRTV estaba prevista para hoy, pero se anuló a última hora de ayer porque algunos de sus miembros no podían asistir. En la convocatoria estaba prevista la creación de una comisión que velase por la pluralidad informativa durante la campaña electoral. PASA A LA PÁGINA 4
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 27 de abril de 1999