El rey Juan Carlos impuso ayer a su hijo el Príncipe de Asturias la Gran Cruz de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo en un acto celebrado en el Real Monasterio de San Lorenzo del Escorial al que también asistieron la reina Doña Sofía y los duques de Lugo, además del vicepresidente Francisco Álvarez Cascos y el ministro de Defensa, Eduardo Serra.Don Felipe agradeció la condecoración con un breve discurso en el que manifestó su "compromiso sin límites de defender con honor y lealtad el prestigio de los Ejércitos y contribuir al engrandecimiento de España". La Orden de San Hermenegildo fue fundada por Fernando VII en 1814 y distingue a los militares que se destacan por su constancia en el servicio y su intachable conducta.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 18 de mayo de 1999