Una de las razones por las que los plásticos abundan es que se les puede conferir una gran variedad de propiedades mecánicas, desde la rigidez hasta la elasticidad. Ahora, un grupo de químicos de las universidades de Ulm (Alemania) y Helsinki (Finlandia) han desarrollado un procedimiento para modular fácilmente las características del polipropileno.El polipropileno se produce enlazando moléculas de propileno, que tienen cada una un brazo (un grupo de tres átomos de hidrógeno unido a uno de carbono). De la orientación de estos brazos dependen en gran medida las propiedades del material: si todos se alinean ordenadamente en una dirección el resultado será parecido a un cristal, mientras que si la orientación varía aleatoriamente el plástico será flexible.
El proceso de catálisis presentado en el Journal of the American Chemical Society permite inducir en la producción de plásticos rígidos (con los brazos de las moléculas ordenadamente orientados) una tasa de error controlable que determina el grado de flexibilidad resultante. Cuando la tasa de error es baja, el plástico será rígido, mientras que una tasa de error alta producirá un material viscoso.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 26 de mayo de 1999