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CARTAS AL DIRECTOR

Túnel de Costa Rica (y 2)

¿Se respetan los acuerdos de los plenos de las juntas municipales del Ayuntamiento? El polémico túnel de la calle Costa Rica, inaugurado en el año 1991, sigue dando quebraderos de cabeza a sus sufridos vecinos. Una de sus dos entradas/salidas, la situada en Gran Vía de Hortaleza, sólo cuenta con un edificio de 175 viviendas y, a continuación, un pinar de más de 600 metros de longitud. Sin saber por qué, no se ha evitado dicho edificio y se ubica la boca del túnel a la mitad del mismo. Esto produce a los vecinos un nivel de ruido de 75 decibelios, medidos por el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid, y firmado por don Gonzalo Escobar Martínez (jefe de niveles sonoros). Como los vecinos llevamos siete años padeciendo esta situación y desde el año 1996 estamos movilizándonos sin obtener resultado, decidimos acudir a los plenos de nuestra Junta Municipal de distrito, presidida por la edil de Hortaleza doña Carmen Rodríguez Flores, que ha sido presentada otra vez por el Partido Popular para las elecciones municipales del próximo domingo. En el último pleno del día 27 de abril de 1999, el acta recoge que doña Carmen Rodríguez "pondrá un radar y luego alargará el túnel", y esto lo dice después de haber instado a la Gerencia de Urbanismo para hacer las obras necesarias para aislar los ruidos y haber hablado con los técnicos e ingenieros que hicieron el túnel, pero un mes después, la única solución que da cuando se le pregunta por las obras, es que va a sacar a concurso una nueva medición. Los vecinos, indignados, nos preguntamos: ¿lo que se decide en los plenos y los compromisos que se toman delante del equipo del Ayuntamiento y de la oposición no sirven para nada? ¿No se respetan? ¿Por qué concursar una nueva medición fuera del área de Medio Ambiente? ¿No se fía de su propio Ayuntamiento?" Ahora que estamos en pleno proceso electoral, creemos más que nunca que se deben respetar los acuerdos y compromisos adquiridos en los plenos municipales y no tratar el asunto como una simple propaganda electoral. Si es así, los madrileños acudiremos a las urnas con auténtica desgana porque para qué vamos si no se respetan los compromisos adquiridos.- . .

* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de junio de 1999