Coca-Cola decidió ayer retirar del mercado polaco todas las botellas de cristal de 33 centilitros de cualquiera de las marcas de agua y refrescos que comercializa en este país, según anunció Ron Pugsley, el director de la filial polaca. Pugsley no quiso precisar el número de botellas que serán retiradas, ni el coste de la operación que, en principio, durará cinco días, y explicó que la decisión fue tomada tras comprobar la falta de eficacia del proceso de lavado de estos recipientes: la compañía había descubierto restos de moho en las botellas de 33 centilitros de agua mineral Bonaqa, aunque el 99,6% de las bebidas no estaban contaminadas. Las botellas de cristal serán reemplazadas por unas de plástico o por latas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 1 de julio de 1999