El coordinador general de Esquerra Unida, Joan Ribó, abogó ayer por introducir "cambios serios" en el política del partido pero sin cambiar las líneas programáticas acordadas en la última asamblea. Ribó, tras la aprobación de su informe en el Consell Nacional en la noche del pasado jueves por 37 votos a favor, nueve en contra y 13 abstenciones, se mostró partidario de "cambiar el mensaje". "Lo que no tenemos que hacer es cerrarnos en un debate interno y de dirección a través de una asamblea extraordinaria de IU, ya que esto afectaría a las federaciones", dijo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 3 de julio de 1999