Cerca de la mitad de la población de Bilbao, 180.000 vecinos, permaneció toda la mañana de ayer sin suministro de agua en sus hogares debido a las obras de renovación de una tubería. El corte sólo estaba previsto que durase desde la noche del jueves hasta las ocho de la mañana de ayer, pero la prolongación de los trabajos alargó también la interrupción del suministro y afectó a más del doble de los residentes previstos. Gran parte de la zona centro de Bilbao y el barrio de Deusto padecieron las molestias del corte de agua, que no quedó normalizado hasta las 13.00. "El problema ha sido que, al demorarse más las obras, el poco agua que había se ha consumido cuando la gente ha empezado a enchufar las lavadoras o ducharse", explicó el subdirector de Infraestructuras del consistorio bilbaíno. De este modo, las 110.000 personas que, en la noche del jueves, tuvieron una bajada de la presión del agua se unieron, en la carencia de abastecimiento, a los 70.000 vecinos previstos en un principio. La suspensión del suministro se ha convertido en una práctica casi habitual en Bilbao debido a su obsoleta red de tuberías. PÁGINA 8
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 3 de julio de 1999