El responsable de la lucha contra el narcotráfico de Estados Unidos, el general Barry McCaffrey, conocido como el zar antidrogas, expresó ayer su apoyo al Gobierno colombiano y descartó una intervención en el país latinoamericano ante las conjeturas desatadas tras el accidente de un avión en el que perecieron cinco agentes antidrogas estadounidenses y dos militares colombianos.McCaffrey, además, reclamó más ayuda para Bogotá en el combate contra la guerrilla y el tráfico de drogas. "Estados Unidos ha atendido de manera poco adecuada a una urgencia importante y creciente", reconoció el zar en referencia a la situación que atraviesa Colombia. El general se refiere a que Estados Unidos debería proporcionar más dinero, más helicópteros y más formación para las tropas colombianas.
Y explicó por qué: "Hay 240.000 soldados y policías y un pueblo de 37 millones que se enfrentan a los ataques salvajes de 20.000 guerrilleros y 5.000 paramilitares que se subvencionan gracias al narcotráfico. Es una situación que provoca un miedo increíble". El ministro colombiano de Defensa, Luis Ramírez, ya ha solicitado a Estados Unidos 500 millones de dólares (80.000 millones de pesetas) para defenderse de la guerrilla y el tráfico de estupefacientes en los próximos dos años. El zar está de su parte, y ya ha pedido que la ayuda a América Latina se triplique hasta mil millones de dólares el próximo año (160.000 millones de pesetas).
La visita del general a Colombia, que concluyó ayer después de dos días, responde al creciente interés de la Administración de Bill Clinton en la situación militar y política que vive América Latina. En una conferencia de prensa que Clinton ofreció la semana pasada, el presidente estadounidense reconoció que las inversiones de su país en Colombia corren peligro. "Muchos de nuestros intereses saldrán beneficiados si ayudamos a resolver los conflictos de Colombia", reconoció Clinton.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 28 de julio de 1999