Dos personas muertas y al menos 211 heridas, de ellas cuatro de gravedad, es el resultado del accidente que sufrió un avión McDonnell Douglas 11 de la compañía taiwanesa China Airlines, con 315 personas a bordo, que se incendió al aterrizar en el aeropuerto de Hong Kong en medio de una violenta tormenta tropical.Testigos del accidente vieron cómo el aparato tomó tierra con un motor ardiendo y al tocar la pista su ala derecha rozó el suelo y a continuación el fuego se extendió al resto de la estructura del avión. El aparato realizaba el vuelo entre Bangkok y Hong Kong.
La aproximación del aparato a Hong Kong se produjo bajo condiciones meteorológicas adversas debido a la presencia del tifón Sam, con vientos de hasta 100 kilómetros por hora, según informó la televisión local.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 23 de agosto de 1999