Ante unos 3.000 espectadores, Brasil se exhibió ayer en la playa alicantina de El Postiguet y se impuso con claridad a España en la final de la Copa del Mundo de Fútbol Playa (7-1). Brasil hizo valer su enorme calidad técnica para revalidar su título. Los españoles, con jugadores como Butragueño (en la imagen), se proclamaron subcampeones mundiales de la especialidad con un único gol que anotó Quique Setién.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 6 de septiembre de 1999