Si las previsiones del Comité Anticorridas de Toros de Holanda se cumplen, los obispados españoles se van a ver inundados en los próximos días de tarjetas postales portadoras de un desgarrador mensaje, acompañado de la fotografía de un toro agonizante: "Por favor, usted que tiene autoridad moral y poder para ello, ¡diga no a esta horrible crueldad!". Según Jessica Ooms, portavoz del comité holandés, los obispos son en parte responsables porque "al amparo del carácter religioso de las fiestas patronales de los pueblos y ciudades, se tortura a decenas de toros tanto en encierros como en las plazas". El comité, que, entre otras acciones, coloca todos los veranos un gran cartel en el aeropuerto de Amsterdam pidiendo a sus compatriotas que no vayan a las corridas durante sus vacaciones, ha empezado a enviar ya parte de las 10.000 tarjetas que va a distribuir entre sus miembros y simpatizantes.—
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 6 de octubre de 1999