Las esculturas necesitan aire, espacio y en ocasiones contacto o contraste con la naturaleza. Es por ello por lo que vale la pena celebrar la iniciativa del Ayuntamiento de Vilassar de Dalt de empezar un programa de exposiciones escultóricas en el recién inaugurado parque de Can Rafart. El fuego lo ha abierto el escultor de Mataró Llucià González Viza, que presenta 17 esculturas de gran formato en acero corten distribuidas en diferentes enclaves del parque y otras 25 piezas de pequeño formato que se exhiben en el interior del Centro de Cultura situado en el interior del mismo recinto. La exposición de Llucià -así firma el artista- tiene como comisaria a la crítica Maria Lluïsa Borràs y se acompaña de un extenso catálogo en el que, además de las obras expuestas, se hace un completo análisis de la trayectoria del artista.
Es una corta trayectoria ya que Llucià (Mataró, 1946) se dio a conocer como escultor en 1996. Anteriormente había ejercido como herrero y metalista industrial, lo que sin duda le asegura un conocimiento extenso de los materiales con que trabaja. Él explica en su texto que es un artista que se ha dejado guiar por su propia intuición sin atender a modas ni tendencias artísticas. Son obras abstractas, aunque con someras referencias figurativas que la comisaria califica de poéticas y en cierta manera de minimalistas, en el sentido de que están realizadas a partir de unos mínimos elementos geométricos.
La exposición puede visitarse durante el horario de apertura del parque público y estará abierta hasta el 31 de octubre.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 12 de octubre de 1999