Michael Schumacher, que regresa al Mundial de F-1 el domingo en el GP de Malaisia, aseguró que defenderá los intereses de Ferrari y no los de su compañero de equipo Eddie Irvine que lucha por el título y está a dos puntos de Mika Hakkinen.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 14 de octubre de 1999