La Audiencia de Palma de Mallorca ha condenado a dos guardias civiles a dos años de cárcel y otros dos de suspensión por atentado grave contra la integridad moral de un menor, al que encañonaron con una pistola en la nuca durante un cacheo policial. Según la sentencia, los hechos ocurrieron en la madrugada del 8 de septiembre de 1998, en los aparcamientos de una discoteca de Ibiza. Los agentes, que vestían de paisano, se dirigieron a un grupo de jóvenes de quienes sospecharon que estaban fumando hachís, y propinaron un cachete a uno de ellos, de 17 años. Luego, mientras este mismo menor era agarrado por uno de los guardias, el otro sacaba su pistola y se la colocaba en la nuca. A continuación le obligaron a bajarse los pantalones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 14 de octubre de 1999