Todo depende del cristal con que se mire. El ministro de Trabajo, Manuel Pimentel, escogió ayer la lupa de aumento para presentar en sociedad los presupuestos generales del Estado para el 2000, que calificó de "buenos para España y excelentes para Andalucía". Pimentel mantuvo, en una conferencia de prensa en Sevilla, que la región "es la más beneficiada" por los presupuestos y recordó que las inversiones del Estado (ministerios y entes públicos) en la comunidad superarán los 199.000 millones de pesetas, un 12% más que en 1999 (sin descontar el impacto de la subida de precios). Pimentel rechazó "las críticas frívolas" del PSOE sobre las inversiones del Ejecutivo central, por ceñirse a los fondos aprobados por los ministerios (127.366 millones) para la región y excluir los proyectos de organismos públicos (71.798 millones).
La perspectiva que escogió ayer el ministro de Trabajo contrasta con la elegida hace tres semanas por la candidata del PP a la presidencia a la Junta de Andalucía, Teófila Martínez. Entonces, la dirigente popular se felicitó de la subida en inversiones (22.000 millones en números absolutos) pero también indicó que la participación de Andalucía en la tarta estatal de inversiones descendía de un 13,2% (en 1999) a un 12,1% del volumen total.
De hecho, Madrid (366.000 millones) y Cataluña (213.000 millones) recibirán más inversiones que Andalucía, que es, de largo, la región más poblada (7.234.837 habitantes según el censo de 1996).
Para sostener su argumento, el ministro de Trabajo sumó a las inversiones las políticas activas de empleo. Estas medidas (que incluyen fondos destinados a escuelas-taller, la formación profesional ocupacional, la formacío continua o el plan de empleo rural) ascenderán a 150.000 millones en la región, 29.000 millones más que en 1999.
La transferencia de las políticas activas de empleo a la Junta de Andalucía (anunciada por el anterior ministro de Trabajo, Javier Arenas, hace más de un año) se retrasa "por un problema técnico" entre ambas Administraciones, según Pimentel. "El único motivo de dificultad es que la Junta pide la transferencia de los fondos Inem-corporaciones locales, que nosotros pensamos que no son regionalizables", aseguró.
El ministro de Trabajo recordó que en estos cuatro años el Gobierno central habrá invertido (en términos absolutos) 428.597 millones, "un aumento del 77% respecto a la última legislatura socialista". Pimentel también subrayó el impacto de las nuevas medidas aprobadas por el Ministerio: 15.000 millones de los fondos destinados a 20.000 parados andaluces de más de 45 años y 5.000 millones de la reducción en un 0,25% en las cotizaciones por desempleo que deben pagar las empresas en contratos indefinidos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 19 de octubre de 1999