La SEPI (Sociedad Española de Participaciones Industriales) se ha decantado por McDermott en el proceso de privatización del fabricante vizcaíno de bienes de equipo Babcock&Wilcox. La multinacional estadounidense, que buscaba en la empresa vasca una puerta para entar en el mercado europeo y latinoamericano, tiene hasta final de año para cerrar definitivamente su oferta de adquisición. La SEPI, que considera la opción de McDermott "la mejor", ha tomado esta decisión sin atreverse a descartar completamente a la firma alemana Steinmüller (Babcock Borsing), a la que volvería a incorporar al proceso de privatización sin finalmente fracasa en diciembre el acuerdo con McDermott.Por otro lado, B&W vio ayer como la Sepi volvía a cambiar su presidente, el cuarto en dos años - Ramón Vecino, Joaquín Clotet, Eduardo Gorostiza y, por último, Emilio Cabrera-. La SEPI justificó ayer su decisión en la necesidad de incrementar la cartera de pedidos, actualmente asciende a 30.000 millones de pesetas. B&W tuvo unas pérdidas de 21.000 millones de pesetas el año pasado, con una facturación de 26.738 millones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 22 de octubre de 1999