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La prohibición de fumar en autobuses y vuelos con origen y destino en España entra en vigor mañana

Desde mañana, nadie podrá encender un cigarrillo en los vuelos nacionales ni en los autobuses interurbanos. Estas prohibiciones forman parte de un decreto elaborado por el Gobierno, el tercero sobre la misma materia desde 1988, que también limita esta actividad en trenes y barcos. La compañía Iberia asumió de forma voluntaria y unilateral el contenido de esta norma el pasado 1 de septiembre y lo extendió a todos sus vuelos, incluidos los transoceánicos. La prohibición iguala a España con casi todos los países de la Unión Europea, que ya cuentan con una normativa similar. Los fumadores no podrán mantener su hábito en ningún avión que despegue en una ciudad española para aterrizar en otra, sea de una compañía nacional o extranjera. Incluso si un vuelo internacional hace una escala en Madrid, por ejemplo, para terminar en Barcelona, en ese último tramo tampoco se podrá fumar. Hasta ahora, los únicos vuelos nacionales que permitían fumar eran los que enlazaban la Península con Canarias, ya que la prohibición sólo afectaba a los que duraran menos de 90 minutos.

Los autobuses de larga distancia también vetarán el tabaco. Las últimas filas de asientos que algunas líneas reservaban a los fumadores desaparecen. Trenes y barcos serán, por lo tanto, los únicos transportes públicos tolerantes con el tabaco. Las compañías verán limitados los vagones y camarotes completos destinados a los fumadores a un máximo del 36% de la capacidad, porcentaje que coincide con la población española mayor de 16 años que se declara fumadora.

La nueva norma coincide con una campaña del Misterio de Sanidad y Consumo, presentada ayer en Madrid, que pretende concienciar a la población de los riesgos que el tabaco supone para la salud, así como dar a conocer los lugares en los que está prohibido fumar. El presidente del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo, Víctor López, subrayó ayer que el Gobierno "no tiene voluntad política" para hacer cumplir estas leyes, informa Europa Press, y pidió la creación de un organismo que centralizara las denuncias.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 6 de noviembre de 1999