La imputación judicial de un supuesto delito de cohecho a tres concejales del PP de Callosa de Segura acusados de intentar sobornar a un edil socialista para consumar una moción de censura, no ha modificado ni un ápice la postura oficial del partido al respecto. La dirección de los populares, en Valencia y Alicante, mantiene su apoyo a los ediles imputados, y asegura que se trata de una denuncia falsa, sin contenido, que responde a "intereses políticos" concretos.El presidente del PP de Alicante, Julio de España, rechazó ayer que los casos Callosa y Sanlúcar sean comparables. "En Andalucía se ha demostrado un caso de corrupción, con dinero en la mano, y lo de aquí no es más que una denuncia que no se apoya en nada salvo en las declaraciones de un concejal".
De España aseguró que su partido es contrario a violar la voluntad ciudadana trasladada en las urnas, "y por eso ha firmado un pacto nacional" contra el transfuguismo.
El PP no da crédito a la denuncia ni a la declaración del concejal socialista que presuntamente recibió una oferta de prebendas a cambio de traicionar a sus compañeros. "Hablemos de pruebas, y luego decidamos", señaló De España en un encuentro que celebró con los periodistas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 9 de noviembre de 1999