Augusto Pinochet, que deberá decidir en breve si se somete a las pruebas médicas solicitadas por el minsitro británico de Interior, Jack Straw, va a cambiar de vivienda. De su mansión en Essex, cercana a Londres, desea trasladarse a otra próxima del mar. Los abogados de Pinochet evalúan los pros y contras de someter a su cliente al chequeo propuesto, pues si de éste se concluye que su estado de salud es bueno la vía humaniataria podría quedar cerrada.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 9 de noviembre de 1999