El informe de José Orad, encargado por los familiares de las víctimas del derrumbe del muro del Bazar España, sostiene que el perito judicial se equivocó al situar los puntos cardinales. Según Orad, la dirección norte-sur utilizada por Francisco Granero en su informe "está desviada unos 36º de la real". Este error, "grave", según el trabajo de Orad, también se observa en el proyecto de demolición del del arquitecto Luis Recuenco y provoca que los cálculos de la incidencia del viento sobre el muro sean incorrectos. El documento redactado por Francisco Granero situaba la pared que se desplomó (hacia la avenida de Miraflores) en el Norte geográfico. El día 31 de diciembre de 1998, el viento sopló en dirección Sur-Norte. Según el informe de Granero, las ráfagas incidían de forma directa sobre el cerramiento de ladrillos que se derrumbó y mató a cinco personas. El perito judicial atribuyó al "viento huracanado" el desplome.
Por el contrario, el perito de las familias de las víctimas, José Orad, considera estos cálculos erróneos en 36º respecto a la localización real -en su informe sitúa el Norte en la calle de San Juan Bosco-, lo que invalidaría las demás conclusiones de Granero sobre la incidencia del viento sobre el muro. Orad asegura que la intensidad de las rachas fue, al menos, tres veces menor, teniendo en cuenta la dirección del viento aquel día (Sur-Norte).
Esta equivocación de partida también figura, según el perito de las familias afectadas, en el proyecto de demolición, redactado por el arquitecto Luis Recuenco para Inmobiliaria Osuna.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 19 de noviembre de 1999