Se discuten y reivindican las ventajas fiscales y, en otros aspectos, a disfrutar por quienes tienen suficiente dinero para comprarse piso. Mientras, los que no están en esas circunstancias sufren las medidas retroactivas, de creciente impacto, contra los "alquilados" de antes, a lo que se añade el nomadismo urbano forzoso a que se condena a los alquilados de ahora, además de las tan costosas rentas que se ven obligados a pagar. Sólo en el municipio de Madrid hay, como media, 20 desahucios diarios.Parias jurídicos, unos y otros alquilados, respecto a los que se reconoce que todo el que puede huye a la compra de piso a toda costa. Y, encima, se amenaza con poner peor aún esta situación, cuando lo que hace falta es todo lo contrario, en vez de más medidas contra los alquilados, sufriéndose hoy esa tan dura dualidad social radicalizada, que divide con tanta contundencia a quienes pueden comprar pisos y quienes no pueden.- . Coordinadora Vecinal Independiente. .
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 15 de diciembre de 1999