El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Jesús Posada, consideró ayer "bastante positivo" el acuerdo logrado en el Consejo de Ministros de Pesca de la Unión Europea, aunque reconoció que cualquier recorte es "doloroso" para los armadores. No obstante, insistió en que las reducciones son inferiores a las que en un primer momento proponía la Comisión Europea. "Yo dije en el Consejo de Ministros, y sigo manteniendo, que la política pesquera, incluso de reducción, debe hacerse de una forma plurianual, gradual" para lograr que se recupere "un cierto stock". No obstante, matizó que lo que no puede darse son "unas reducciones que dejen a las flotas sin poder salir, que era el caso de la anchoa".
En lo referente a los problemas de los pescadores españoles de anchoa, el titular de Agricultura señaló que se ha llegado a una solución provisional "que permite que la flota española y francesa, con más dificultades que el año pasado, puedan llegar a acuerdos para poder pescar".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 20 de diciembre de 1999