El Betlem de Tirisiti, un singular auto navideño que se desarrolla en Alcoy desde finales del siglo XIX, tiene condiciones suficientes para ser declarado Bien de Interés Cultural, según una opinión generalizada en la ciudad que ha movido al Ayuntamiento de Alcoy ha requerir el apoyo de la Generalitat para que la obra y los muñecos que protagonizan el Belén obtengan el reconocimiento de la Dirección General de Patrimonio. La práctica totalidad de las entidades locales se han adherido a la campaña de promoción, y ya han estampado su firma en el libro de apoyo que hace semanas estrenó el niño Jorge Ferrando, que representará a sant Jordiet en las próximas fiestas de Moros y Cristianos. Tras él han firmado portavoces de todos los colegios en representación de los más de 3.000 niños que hasta ahora han presenciado el Betlem de Tirisiti desde que comenzaron las funciones el 1 de diciembre.
Estos días la ciudad se ha engalanado con banderas y carteles con la imagen de Tirisiti, protagonista del auto que representa al ventero cascarrabias y fanfarrón con una peculiar voz chillona,que se supone negó hospedaje a la Sagrada Familia. La campaña de promoción y firmas concluirá el 4 de enero, último día de las representaciones. Para esta fecha se prevé la celebración de un pleno extraordinario en el barracón donde se representa la obra. Todos los grupos políticos ratificarán la petición ante Cultura.
La tradición oral se ha encargado de mantener el Betlem de Tirisiti, que intercala personajes bíblicos con los más populares que tuvo la ciudad durante el siglo pasado. Su primera representación se debe a José Esteve Carbonell, hacia 1880.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 28 de diciembre de 1999