En el texto de R. Fraguas titulado Contra la mediocridad y el tedio (EL PAÍS, 12 de enero) se lee " se exiló a Buenos Aires en 1937". Ahora, que tanto se habla del exilio, conviene precisar aquel dato, porque la realidad es que Ramón huyó del denominado Madrid rojo el 29 de agosto de 1936, huyendo, según su propia declaración, de la que peyorativamente llamó "revolución" ("La revolución es más crimen que la guerra", escribió). Como relata en sus Nuevos retratos contemporáneos, lo que le decidió a la huida fue la torva estampa del atrabiliario poeta Pedro Luis de Gálvez, pertechado con dos pistolas y un máuser, paseando por aquel Madrid.- Enrique de Aguinaga, cronista de la Villa. Madrid.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 19 de enero de 2000