La paz fiscal sellada ayer en Vitoria por los gobiernos central y vasco tendrá un efecto dominó en los territorios limítrofes al País Vasco. Dado que Euskadi derogará sus normas más polémicas, las demandas interpuestas por Castilla y León, Cantabria y La Rioja, y algunas asociaciones empresariales de esos territorios, quedarán sin objeto. Así lo confirmó ayer el vicepresidente Rodrigo Rato. Sin embargo, algunos dirigentes de esas autonomías -todas en manos del PP- recalcaron ayer que, de momento, mantendrán todos sus recursos judiciales.El presidente de La Rioja, Pedro Sanz, fue el más radical: "No vamos a retirar los recursos presentados, y en el momento que queramos podemos volver a presentar más", dijo. "Se trata de un acuerdo entre el Gobierno vasco y el central que ni obliga ni compromete a esta comunidad. Uno no retira las cosas porque sí, ni a cambio de nada. Cuando se produzca esta situación será porque recibamos algo. Hemos tenido esa habilidad para intervenir en la negociación y conseguir el máximo beneficio" para La Rioja.
La respuesta de los agentes sociales riojanos estuvo en la misma sintonía que la de Sanz. Así, la Federación de Empresarios comunicó la intención de mantener sus propios recursos mientras no se conozca con exactitud el alcance del acuerdo.
El mismo argumento utilizó el presidente de Castilla y León, Juan José Lucas, también del PP, quien aclaró que seguirá defendiendo los intereses de su comunidad si considera que "algún aspecto es objeto todavía de necesidad de recurso". Pese a todo, estas posiciones tienen un sentido más efectista que productivo porque, al eliminar el País Vasco sus medidas fiscales más conflictivas, los recursos de las comunidades limítrofes carecen de sentido.
Las reticencias de algunos dirigentes autonómicos contrastan con el hecho de que han seguido de cerca las negociaciones y que se hayan atendido sus demandas en la redacción final del acuerdo. Además, las tres autonomías limítrofes fueron invitadas ayer por la Diputación de Álava -también gobernada por el PP- para escenificar el nuevo rumbo en las relaciones fiscales entre todas estas comunidades. Los consejeros de Hacienda de Castilla y León, Cantabria y La Rioja acudieron a Vitoria para escuchar a Rato de primera mano los términos del acuerdo. A la cita no asistió ningún miembro del Gobierno vasco.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 19 de enero de 2000